¿Un viaje a través del Metro?

Esta semana se puso en operación la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México. Un logro para los capitalinos que nos transportamos durante casi cinco años en una ciudad con  una megaobra como lo es la nueva línea. Pasaron casi 12 años de que se inauguró el segundo tramo de la línea B del Metro el 30 de noviembre de 2000, la cual fue la última línea construida antes de la nueva línea dorada.

La línea 12 tiene 20 estaciones y 26 km, siendo la segunda más larga de la Ciudad de México.

El costo de la nueva línea fue casi de $25 mil millones de pesos. Una parte del Gobierno Federal y otra parte del Gobierno Local.

Unas cuentas respecto al Metro:

  • En el Metro de la Ciudad de México se realizan casi 4 millones de viaje cada día
  • Casi 10% de los viajes son de cortesía,  es decir, viajeros que no pagan su boleto, generalmente personas de la tercera edad, o con discapacidad.
  • Un viaje en Metro debería de costar casi $9 pesos, pero “gracias” al subsidio que se otorga, únicamente cuesta $3.
  • Operar el sistema de Metro le cuesta al gobierno de la Ciudad de México cerca de $36 millones de pesos cada día.
  • Debido a los subsidios, únicamente obtiene cerca de $11 millones de pesos de ganancias.
  • Cada día, $25 millones de pesos son utilizados para subsidiar un boleto del Metro.

Boleto del Metro de 2010

¿PERO LOS SUBSIDIOS SON BUENOS, NO?

Con el dinero que cuesta el subsidio al boleto del Metro, cada mil días podríamos construir una nueva línea 12: ¡podríamos inaugurar dos líneas por sexenio! (y sin endeudarnos).

¡Pero la gente que viaja en el metro no puede pagar los $9 que cuesta!

Al eliminar el subsidio, es posible dirigir esos recursos de una mejor manera. Se podría aumentar el número de viajes de cortesía: estudiantes, madres solteras, adultos mayores, incluso a algunos trabajadores (como algunos sindicatos o a partir de cierto nivel). Incluso hay quienes no pueden pagar los $3 que cuesta actualmente.

SUBSIDIOS, UN ARMA DE DOBLE FILO.

Crear y promover cada vez más subsidios tiene muchas ventajas sociales y particularmente electorales, pero no es necesariamente un óptimo social:

  • Como ese bien es “barato”, al menos para el usuario, no es apreciado como se debería, por ejemplo, gastamos agua de más, pues los usuarios no pagamos el precio completo.
  • La sociedad se mal-acostumbra. Difícilmente un gobierno logrará quitar el subsidio de un bien sin ser fuertemente criticado.
  • Se presta a usos políticos y electorales: “Subiremos los subsidios a…” y no faltó quién propuso subsidiar más la gasolina y los energéticos.
  • El subsidio lo reciben todos, de forma pareja, sin importar si en realidad lo necesitan.

Durante 2012 el gobierno gastará casi $250 mil mdp en subsidios a la gasolina.

En México, las gasolinas tienen un enorme subsidio, y hay quienes proponen subsidiarla aún más. Incluso hay quienes se azotan por los gasolinazos sin tomar en cuenta lo siguiente:

El 10% de los hogares con mayores recursos, los más ricos, son 20 veces más beneficiados por el subsidio a las gasolinas que el 10% de los hogares más pobres: ¡EL SUBSIDIO A LAS GASOLINAS BENEFICIA (MÁS) A LOS RICOS! beneficia a los que tienen coche, a los que más viajan y a los que consumen productos que requieren mayor transporte. Aquí un análisis mucho más detallado del IMCO y del subsidio a los energéticos.

México gasta ocho veces más en subsidiar la gasolina que en la UNAM. Con lo que cuesta el subsidio se podrían construir 10 nuevas líneas de metro en la Ciudad de México al año. Incluso hemos recibido sugerencias del FMI para eliminar ese subsidio.

Uno de los problemas con cualquier subsidio es que se aplica de forma pareja: todos los boletos del Metro cuestan $3, pero hay quienes bien podrían pagar el costo total del boleto y hay quienes ese precio es alto. Es hacer un programa de gobierno costoso, no muy bien dirigido y no muy eficiente.

Comments

  1. Definitivamente los subsidios son un arma de doble filo, y la gran cantidad de estos es resultado de un gobierno paternalista y de una eterna campaña electoral.

    En lo personal, creo que los subsidios son necesarios, pero estos deben de ser controlados y siempre en busca de apoyar al sector de la población más desprotegido. Citando el punto del subsidio a la gasolina, este es demasiado general, una propuesta hacer una restricción a su aplicación, es decir, disminuirlo o en lo posible desaparecerlo para particulares, y se mantenga para el sector dedicado a la transportación de bienes de consumo, así la aplicación de este subsido servirá para mantener y/o disminuir los costos de transportación de bienes de primera necesidad (Canasta básica), y con esto tener un precio estable y accesible. De esta forma, el subsidio al precio de la gasolina tendrá un sentido social.

    Al disminuir el subsidio a la gasolina, se tendría que ajustar forzosamente la tarifa al transporte público, aunque esto tenga como consecuencia dejar de ser la ciudad con el transporte público más barato no sólo del país, sino de Latinoamerica.

    Volviendo al tema del subsidio al precio del metro, su eliminación sería una medida demasiado agresiva, la propuesta sería copiar el modelo de cobro del tren suburbano del Estado de México, el cual es un cobro por distancia recorrida, este transporte sólo cuenta con dos tarífas, de 0 a 12.8 km el precio es de $6.50, y de 12.9 a 25.6 km es de $15.00. Gracias a esta tarifa, después de cuatro años en funcionamiento, las instalaciones de estaciones, así como de los trenes, permanecen en excelentes condiciones, además de que el servicio ofrecido es muy bueno.

    Aterrizando esto al caso del metro en la ciudad de México, una solución poco agresiva es aplicar el cobro por distancia recorrida, siendo el monto mínimo a pagar de $3.00 y el máximo de $9.00, de esta forma el incremento del precio podría ser percibido como justo. Esta forma de cobro podría ser aplicada para todos los sistemas de transporte ofrecidos por el gobierno del Distrito Federal.

  2. Totalmente de acuerdo con que los subsidios solo benefician a los que mas tienen…

  3. Definitivamentela solución será tener un SISTEMA DE TRANSPORTE PÚBLICO COMODO, SEGURO, EFICIENTE, LIMPIO y ÁGIL, con ello, seguramente mchas personas se inclinarían por utiizarlo. tras estos transportes públicos esten CONCESIONADOS a particulares y no se les obligue a alinearse con los estándares de países desarrollados, seguiremos PADECIENDO los habitantes de la Ciudad.
    Desaparecer los CHIMECOS, LOS “PESEROS” y sus CACHARPOS, así como la constumbre de hacer Paraderos en cada esquina. Esa es la Solución.

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